El Gobierno de Bolivia está intensificando sus esfuerzos para combatir dos de las principales causas de muerte prevenible en mujeres bolivianas: el cáncer de mama y el cáncer cérvico uterino. Con un enfoque en tecnología, infraestructura, equipamiento, formación de profesionales y legislación, el país sudamericano busca reducir drásticamente los índices de mortalidad por estas enfermedades.

El Director General de Redes de Salud, Yecid Humacayo, enfatizó la importancia de aumentar la conciencia sobre la salud de las mujeres y destacó que el cáncer cérvico uterino ocupa el primer lugar, seguido del cáncer de mama en términos de prevalencia y mortalidad en Bolivia.

La Red de Salud ha establecido tres centros dedicados a abordar estas preocupantes estadísticas. El centro más antiguo, ubicado en El Alto, comenzó a operar en marzo de 2022, mientras que el segundo, construido en Santa Cruz, inició sus operaciones en septiembre del mismo año. Estos centros han brindado más de 17,000 atenciones médicas hasta la fecha, con un énfasis en la atención de pacientes femeninas. Casi el 70% de los pacientes son mujeres, la mayoría de las cuales padecen cáncer cérvico uterino.

La estrategia del Gobierno boliviano se basa en varios pilares. En primer lugar, se ha invertido en infraestructura médica y equipos de última generación en estos centros de salud, lo que garantiza una atención médica de calidad. Además, se ha puesto un énfasis significativo en la formación y capacitación de profesionales de la salud para diagnosticar y tratar eficazmente estas enfermedades.

La legislación también está desempeñando un papel crucial en este esfuerzo. Las iniciativas de detección temprana, programas de concientización y campañas de prevención se han convertido en una parte fundamental de la estrategia para reducir la mortalidad por cáncer de mama y cáncer cérvico uterino. El acceso a pruebas de detección y servicios de atención médica es un derecho para todas las mujeres bolivianas.

El Gobierno está comprometido en seguir fortaleciendo sus esfuerzos y colaborar con organizaciones nacionales e internacionales en la lucha contra estas enfermedades mortales.

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