El Gobierno de Cuba calcula que las restricciones impuestas por Estados Unidos entre marzo de 2022 y febrero de 2023 han ocasionado daños económicos valuados en 4.867 millones de dólares (aproximadamente 4.580 millones de euros).
La Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), ha vuelto a solicitar el fin del embargo estadounidense sobre Cuba con una abrumadora mayoría de votos a favor, con la única oposición de las delegaciones de Estados Unidos e Israel, y una abstención de Ucrania.
Desde 1992, Cuba presenta esta solicitud en la ONU para mostrar el amplio apoyo de la comunidad internacional a su causa, aunque es un gesto simbólico, ya que el texto no tiene carácter vinculante.
De esta forma, el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, ha considerado esta votación como una “nueva victoria” política y un reconocimiento al “heroísmo” y la “resistencia” de su país.
Asimismo, el ministro de Relaciones Exteriores cubano, Bruno Rodríguez, ha destacado que este apoyo de 187 países a la iniciativa, demuestra el aislamiento completo de Estados Unidos en una política que considera “ilegal, abusiva y moralmente insostenible“.
El embargo a Cuba ha tenido un impacto económico significativo, con pérdidas estimadas por las autoridades cubanas en aproximadamente 160.000 millones de dólares (más de 150.000 millones de euros) desde su inicio en 1958. Según La Habana, sin embargo, el PIB cubano podría haber aumentado en un 9 por ciento en el período mencionado.
Finalmente, el presidente del país, Luis Arce Catacora, a través de su Twitter (X), menciona su apoyo hacía Cuba y su victoria revolucionaria en la Asamblea General de la ONU.
“Desde el Estado Plurinacional de Bolivia hacemos nuestra la victoria revolucionaria del valeroso pueblo de Cuba en la Asamblea General de las Naciones Unidas. Con 187 votos, los pueblos del mundo se unieron en una sola voz para exigir el fin del criminal bloqueo económico, financiero y comercial de más de 60 años en contra del pueblo cubano”, subrayó el mandatario.