Este jueves 23 de noviembre, Daniel Noboa, de 36 años, se convierte en el presidente más joven elegido en las urnas en la historia de Ecuador, asumiendo la presidencia en un periodo excepcional de 1 año y 6 meses. Lo que muchos ya etiquetan como un “gobierno exprés” es, en realidad, la culminación del mandato actual que no pudo completar el presidente saliente Guillermo Lasso.
El mandato presidencial estándar en Ecuador es de 4 años, pero en esta situación particular, Daniel Noboa no inicia un nuevo período, sino que completa el actual, el cual quedó inconcluso debido a circunstancias inusuales en la política ecuatoriana. En mayo pasado, Guillermo Lasso, enfrentando un juicio político por malversación de fondos, activó el mecanismo constitucional coloquialmente conocido como “muerte cruzada“, marcando un acontecimiento sin precedentes en Ecuador.
La activación de este mecanismo condujo automáticamente a la disolución de la Asamblea y convocó a elecciones anticipadas. En este proceso, de manera sorprendente y tras un ascenso maratónico, Daniel Noboa, representando al movimiento Acción Democrática Nacimiento (ADN), resultó electo en segunda vuelta el 15 de octubre.
El nuevo presidente asume el desafío de liderar el país en un periodo acotado, con la responsabilidad de dar continuidad a la gestión gubernamental en medio de las complejidades políticas y económicas que Ecuador enfrenta.