Un niño de tres años fue internado de emergencia en el Hospital del Niño de Cochabamba con quemaduras de segundo y tercer grado en los glúteos, presuntamente infligidas por su propia madre. El incidente ocurrió la semana pasada cuando el menor fue sentado sobre ladrillos calientes, una práctica que la madre habría utilizado para intentar curar una complicación médica que afectaba al niño.
Según Pablo Dávila, pediatra del Hospital del Niño, el pequeño presenta quemaduras en aproximadamente un 8% de su superficie corporal. “Esta jornada se realizará una cirugía, seguida de un tratamiento especializado“, detalló el médico. Las heridas, que habían empeorado durante siete días en los que la madre intentó tratarlas con pomadas caseras, finalmente llevaron al traslado del niño al hospital.
El menor, además, sufre de una condición que le provoca incontinencia urinaria, lo que habría motivado a la madre a recurrir a métodos basados en creencias tradicionales para aliviar su dolencia. Las autoridades investigan la situación, y la Defensoría de la Niñez y Adolescencia de Cochabamba ha informado que la madre será imputada por el delito de lesiones graves y gravísimas.
Este trágico caso ha generado conmoción y pone en evidencia la necesidad de mayor educación y acceso a tratamientos médicos adecuados en situaciones de salud que podrían fácilmente complicarse si no se atienden a tiempo.