En respuesta a las crecientes tensiones políticas y sociales, el presidente Luis Arce afirmó el domingo que su administración está comprometida a defender el proceso democrático y a enfrentar cualquier intento de generar miedo, incertidumbre y violencia en el país.
“Agradecemos el permanente respaldo de nuestras regiones y organizaciones sociales, quienes pueden estar seguras de que vamos a defender nuestra democracia y el futuro de nuestras hijas e hijos”, señaló el mandatario a través de sus redes sociales.
La declaración de Arce surge en un contexto de creciente agitación política, con la oposición de derecha criticando los resultados preliminares del Censo de Población y Vivienda, y el bloque encabezado por Evo Morales manifestando su descontento con la habilitación de su candidatura presidencial para 2025. Ambos sectores han anunciado posibles movimientos que podrían generar convulsión en el país.
El Presidente reiteró que su gobierno no se dejará intimidar por estas amenazas. “Nosotros estamos construyendo futuro y no vamos a traicionar a nuestro pueblo huyendo cuando más nos necesita”, afirmó Arce.
En su discurso, Arce también abordó los desafíos económicos que enfrenta Bolivia, especialmente en relación con el sector de hidrocarburos. Destacó que su administración está enfocada en corregir errores del pasado y en establecer soluciones estructurales para asegurar una economía diversificada y sostenible.
El presidente subrayó que el gobierno está trabajando para rectificar las deficiencias de la política hidrocarburífera anterior, que, según él, falló en la exploración y expansión de recursos. Actualmente, Bolivia importa el 86% del diésel que consume, mientras que solo produce el 14%. Para enfrentar esta dependencia, se están implementando medidas a largo plazo.
En este sentido, la estatal, Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) ha iniciado la exploración de 28 nuevos pozos y planea completar más de 40 este año. Los primeros resultados de esta exploración han sido prometedores.
El Gobierno de Arce asegura que estas acciones forman parte de un esfuerzo más amplio por construir una economía de base ancha que no dependa de un solo sector, a diferencia de los enfoques del pasado que priorizaban una visión capitalista de corto plazo.
El presidente Arce enfatizó que su administración se mantendrá firme en su compromiso con la justicia y la estabilidad, asegurando que Bolivia continúe avanzando en un camino de crecimiento y desarrollo sostenible.