Este monto está incluido en el proyecto del Presupuesto General del Estado (PGE) 2025, que se encuentra en tratamiento en el Legislativo.

El Gobierno del presidente Luis Arce reafirma su compromiso con los sectores más vulnerables de la población al garantizar un presupuesto de Bs 6.552 millones para la entrega de cinco bonos sociales en 2025, beneficiando a más de cuatro millones de bolivianos.

“Garantizamos 6.552 millones de bolivianos para los cinco bonos sociales dirigidos a la población vulnerable”,  manifestó el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas en sus redes sociales.

Este ambicioso programa social, que está incluido en el Presupuesto General del Estado (PGE) 2025, posibilita llegar a más de cuatro millones de beneficiarios a escala nacional.

De acuerdo con los datos de Economía, Arce destinó para la Renta Dignidad un presupuesto de Bs 5.529 millones, que proyecta beneficiar a 1,3 millones de adultos mayores, asegurando el derecho a una vejez digna.

Para el Bono Juancito Pinto se llegará a más de 2,3 millones de estudiantes, con una inversión de Bs 478 millones, para fomentar la educación y reducir la deserción escolar.

Para el Bono Juana Azurduy se llegará a 242 mil madres sin seguro de salud, este bono recibirá Bs 187 millones, garantizando el derecho a la vida y la salud materna.

Asimismo, para el Subsidio Universal Prenatal se contemplaron Bs 163 millones y se beneficiará a 104 mil madres, niñas y niños sin seguro de salud, ofreciendo productos esenciales para su bienestar.

Por último, para el bono para personas con discapacidad grave y muy grave, dirigido a más de 65 mil beneficiarios, se contará con Bs 195 millones, reafirmando el compromiso del Estado con la inclusión social.

El presidente Arce ha consolidado su gestión como una de las más comprometidas con la justicia social, impulsando políticas que priorizan el bienestar de las familias bolivianas. La inversión en estos programas no solo asegura recursos económicos para quienes más lo necesitan, sino que también fortalece la cohesión social y el acceso a derechos fundamentales.

Con esta medida, el Gobierno ratifica su enfoque en construir una Bolivia más inclusiva, reafirmando el modelo de economía de base ancha que busca redistribuir los recursos de manera equitativa.

“Cada bono social es una muestra del compromiso del Estado con la población más vulnerable, asegurando su acceso a derechos fundamentales como la educación, la salud y la seguridad económica”, destacó el ministerio.

El año 2025 se perfila como otro periodo de avances significativos en la lucha contra la pobreza y la desigualdad en el país, consolidando el liderazgo de Arce en el fortalecimiento de una economía al servicio del pueblo.

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