El ministro de Medio Ambiente y Agua, Alan Lisperguer, realizó una inspección técnica en el embalse Estrellani y la represa Incachaca, ubicadas en La Paz, con el objetivo de verificar los niveles de almacenamiento y asegurar el suministro de agua potable a la población. Durante su recorrido, estuvo acompañado por autoridades de la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (Epsas) y otros expertos del área.
El presidente Luis Arce destacó la importancia de esta inspección, señalando que el trabajo del gobierno es garantizar que el agua llegue con normalidad a los hogares bolivianos. Además, subrayó la necesidad de que los gobiernos municipales tomen medidas preventivas ante cualquier posible contingencia derivada de un rebalse en las represas. Arce reafirmó el compromiso del gobierno con el fortalecimiento de la infraestructura hídrica y el monitoreo constante de las reservas de agua en el país.
Lisperguer detalló que actualmente la represa Incachaca cuenta con 2,4 hectómetros de agua almacenada, lo que equivale al 44,47% de su capacidad total de 5,5 hectómetros. Aseguró que esto garantiza el abastecimiento de agua para las ciudades de La Paz y El Alto durante todo el año, a pesar de las variaciones en las precipitaciones, que este año han sido menores en comparación con el año pasado.
El ministro también señaló que la crisis climática está afectando los patrones de lluvia, por lo que es necesario realizar análisis más específicos por cuenca para hacer proyecciones más acertadas sobre el abastecimiento de agua en el futuro. A pesar de la disminución en las precipitaciones, Lisperguer garantizó que el suministro de agua potable sigue siendo una prioridad para el gobierno.