El presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Luis Arce, asistió al edificio del Tribunal Supremo Electoral (TSE), cumpliendo con su participación en la esperada Cumbre por la Democracia, evento clave para garantizar la transparencia y la planificación de las elecciones generales de 2025. A su lado, estuvo el vicepresidente David Choquehuanca, en su calidad de presidente nato de la Asamblea Legislativa Plurinacional.
El encuentro, que tenía dudas sobre la presencia de algunas autoridades, también contó con la participación del presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, quien, al igual que el presidente Arce, había generado incertidumbre respecto a su asistencia.
En el evento estuvieron presentes representantes de los 14 partidos políticos con personería jurídica de alcance nacional, quienes discutieron cuatro puntos fundamentales. Entre los temas a tratar se encuentran el respeto al principio de preclusión, la incorporación de los vocales del TSE en la Ley 044, de Juicio de Responsabilidades, y la asignación de los recursos necesarios para las elecciones generales de este año. Además, se abordó la implementación del sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), para garantizar la transparencia en el proceso electoral.
Zvonko Matkovic, precandidato opositor, celebró la convocatoria del TSE y expresó su compromiso con la fecha establecida para las elecciones generales, fijada para el 17 de agosto. En declaraciones a los medios, Matkovic resaltó la necesidad de asegurar un padrón electoral limpio y un control electoral riguroso para garantizar elecciones limpias y transparentes.
Por su parte, Félix Patzi, líder del Movimiento Tercer Sistema (MTS), también destacó la importancia de la convocatoria del TSE y la relevancia de este espacio para asegurar la realización de las elecciones sin que se vean interrumpidas o sometidas a presiones por parte de otros órganos del Estado.
Este evento ha generado gran expectativa, ya que se busca consolidar el proceso democrático en Bolivia y fortalecer las condiciones para unas elecciones generales sin contratiempos.