Bolivia avanza a paso firme en su objetivo de convertirse en un proveedor clave de energía eléctrica para Brasil, tras haber reforzado su infraestructura y realizado alianzas estratégicas a lo largo del 2024. El país ha dado importantes pasos en la consolidación de su capacidad para exportar electricidad, posicionándose como un actor clave en el mercado energético regional.
El Ministerio de Hidrocarburos destacó hitos fundamentales, como la creación de ENDE Brasil, subsidiaria de la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE), que tendrá la responsabilidad de gestionar la comercialización y exportación de electricidad ante la Agencia Nacional de Energía Eléctrica de Brasil (ANEEL). Este marco institucional permitirá a Bolivia operar de manera más eficiente en el mercado eléctrico brasileño y contribuir a la integración energética regional.
Uno de los principales proyectos es la Central Hidroeléctrica Jirau en Cota 90, ubicada en territorio brasileño. Este complejo será clave para la integración energética, ya que fortalecerá la capacidad de intercambio de energía entre ambos países. Con la operación de este proyecto, Bolivia refuerza su presencia en el sistema energético de Brasil.
Otro de los grandes avances es la interconexión Germán Busch-Corumbá, una línea de transmisión de 500 kilovoltios (kV) que conectará la provincia cruceña con el nodo de Corumbá, en Brasil. Esta infraestructura será vital para garantizar un suministro eléctrico estable y eficiente, fortaleciendo la red eléctrica binacional y abriendo nuevas posibilidades para la exportación de energía.
Según el Ministerio de Hidrocarburos, uno de los proyectos más destacados en 2024 fue el proyecto Binacional Río Madera, enfocado en evaluar el potencial hidroeléctrico de la zona. Este proyecto concluyó estudios técnicos preliminares, los cuales permitirán definir su viabilidad. Su objetivo es optimizar la seguridad energética en ambos países y aprovechar los recursos compartidos en la región.
“Estos proyectos consolidan el compromiso de Bolivia con la integración energética regional y refuerzan su rol como proveedor estratégico de energía para Brasil,” señaló el Ministerio de Hidrocarburos, destacando el impacto positivo de estas iniciativas para el fortalecimiento de la cooperación energética entre ambos países.
Gracias a estas nuevas infraestructuras, Bolivia podrá exportar excedentes de energía a Brasil, mientras el gigante sudamericano diversifica su matriz energética con fuentes limpias. Con la operación de ENDE Brasil y la futura puesta en marcha de la línea de transmisión Germán Busch-Corumbá, Bolivia se encamina hacia su meta de convertirse en un hub energético en Sudamérica, aprovechando sus recursos hidroeléctricos, solares y gasíferos para consolidar su posición en el mercado regional.