El ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina, reveló que la inversión pública destinada al sector energético en este año alcanzará los 5.085 millones de bolivianos, cubriendo diversos aspectos como exploración, producción y promoción de energías renovables.
Esta declaración se hizo durante la presentación de la Rendición Pública de Cuentas Inicial 2024, donde se delinearon los objetivos de la política energética para la presente gestión, mostrando un compromiso firme con el fortalecimiento de la infraestructura energética y una dirección clara en dicha política.
“Este anuncio no sólo revela un compromiso sólido con el fortalecimiento de la infraestructura energética del país, sino que también marca una dirección clara en la política energética para el período en curso”, aseguró.
Las inversiones planificadas por entidades como YPFB, EEC-GNV, ENDE, YLB, EBIH, ABEN y el Programa de Electrificación Rural suman montos significativos, abarcando desde la exploración y producción de hidrocarburos hasta la promoción de energías renovables y mejoras en la infraestructura de distribución y transmisión.
Este enfoque integral busca no solo asegurar el suministro energético, sino también promover la diversificación de la matriz energética y la adopción de tecnologías más limpias y sostenibles.
El objetivo principal de esta inversión pública, que asciende a 5.085 millones de bolivianos, es optimizar recursos y buscar fuentes de energía más limpias y eficientes.
Se espera que estas inversiones impulsen el crecimiento económico y contribuyan a reducir la dependencia energética del país, así como a mitigar los impactos ambientales.
Finalmente, este anuncio refleja la importancia que el Gobierno otorga a la estrategia energética y su compromiso con el desarrollo sostenible y la protección del medio ambiente.