En las últimas horas, siete militares fueron enviados a prisión preventiva y once recibieron arresto domiciliario, informó el Ministerio de Gobierno de Bolivia. Los implicados participaron en la reciente toma militar en el kilómetro cero de La Paz.
La primera audiencia cautelar, que comenzó en la madrugada del sábado y se extendió hasta la tarde, incluyó la comparecencia de 14 militares ante un juez. De ellos, cuatro fueron enviados a la cárcel de máxima seguridad de Chonchocoro, según detalló el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, el domingo. Los otros diez militares cumplirán arresto domiciliario bajo vigilancia policial. Sin embargo, Del Castillo expresó su preocupación por la falta de suficientes policías para custodiar a todos los procesados y anunció una apelación contra el fallo judicial.
En una segunda audiencia cautelar, se procesaron a cuatro militares más, incluido el excomandante de la Fuerza Aérea, Marcelo Zegarra, quien recibió arresto domiciliario por su colaboración con la Fiscalía en la investigación del presunto intento de golpe de Estado. “Ha proporcionado detalles exhaustivos en reuniones previas al intento de golpe fallido“, afirmó Del Castillo. Los otros tres detenidos de esta audiencia fueron enviados a prisión preventiva por su participación en la toma del palacio presidencial.
Con los siete militares encarcelados en las últimas horas, el número total de detenidos asciende a diez. El pasado viernes, Juan José Zúñiga, el excomandante del Ejército destituido y acusado de liderar la revuelta militar del 26 de junio, y otros dos exjefes militares, también recibieron prisión preventiva. Zúñiga lideró una acción militar el miércoles anterior, con el objetivo, según él, de “cambiar el gabinete de Gobierno” atentando contra la democracia en Bolivia. Tras llegar al palacio presidencial en una tanqueta, tuvo un enfrentamiento directo con el presidente Luis Arce, quien le ordenó replegarse y retirar a las fuerzas militares que lo acompañaban.