El director ejecutivo de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), Germán Jiménez, aseguró este lunes que la importación y distribución de combustibles en el país se realiza con normalidad, cumpliendo la instrucción del presidente Luis Arce de garantizar un abastecimiento continuo en todo el territorio nacional. Además, destacó que las largas filas en las estaciones de servicio han disminuido significativamente.
“La demanda diaria de gasolina, que habitualmente es de 7 millones de litros, ha sido incrementada a entre 7,5 y 8 millones. En el caso del diésel, que requiere un promedio de 7 millones de litros diarios, el suministro también se ha elevado a entre 8 y 9 millones de litros”, detalló Jiménez. Este ajuste en los volúmenes ha permitido aumentar los saldos de combustibles tanto en las estaciones de servicio como en las plantas de almacenamiento.
El funcionario explicó que, junto con Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), se está realizando un monitoreo constante para modular los despachos y atender el incremento de la demanda que suele registrarse hacia fin de año. Esta estrategia busca prevenir posibles desabastecimientos durante la temporada alta de consumo.
La ANH también mantiene personal desplegado en diferentes puntos de distribución para supervisar y controlar el cumplimiento de los despachos, brindando así una respuesta más eficiente a las necesidades de la población. “Estamos comprometidos con garantizar un abastecimiento adecuado y continuo”, enfatizó Jiménez.
Por último, se destacó la importancia de la coordinación interinstitucional para sostener la operatividad del sistema de distribución de carburantes y atender las necesidades crecientes de los consumidores en el contexto actual.