En el marco del Plan Soberanía, 8.000 efectivos de las Fuerzas Armadas fueron movilizados para supervisar la distribución de combustibles en el país. Según informó el viceministro de Defensa y Desarrollo Integral, Augusto García, estas medidas buscan asegurar que los carburantes lleguen directamente a las estaciones de servicio.
“Se han desplegado 8.000 soldados, marineros y profesionales en 197 estaciones de servicio, realizando 7.800 operaciones para garantizar el suministro”, explicó García. Este operativo también incluye el control de las cisternas de combustible desde las plantas de distribución hasta los puntos de venta, bajo la vigilancia permanente de personal militar.
La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), en coordinación con el Ministerio de Defensa, reforzó los controles desde octubre, implementando estrategias más estrictas para evitar el desvío de carburantes. Hasta la fecha, se han incautado 273 vehículos y 41 tanques adicionales, además de procesar a 323 personas por prácticas ilegales relacionadas con el contrabando de combustible.
El comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, general de Brigada Gerardo Zabala, señaló que los efectivos han sido capacitados por la ANH para identificar métodos de contrabando, como tanques externos adicionales, bidones interconectados y modificaciones en los vehículos para almacenar combustible de forma ilícita.
Estas acciones forman parte de un esfuerzo integral para combatir el desabastecimiento y garantizar que los recursos energéticos lleguen a la población de manera segura y eficiente.