Después de 16 días de ausencia, aproximadamente 250 efectivos policiales regresarán al Chapare, tras haberse retirado debido a amenazas, hostigamiento y agresiones por parte de grupos afines al expresidente Evo Morales. Así lo confirmó el comandante de la Policía, Augusto Russo, quien indicó que el retorno es resultado de un acuerdo entre el Gobierno nacional y las autoridades municipales de la región, quienes se comprometieron a mejorar las condiciones de trabajo para los efectivos policiales.

El comandante anunció un acto de desagravio en el que los alcaldes de la mancomunidad del trópico de Cochabamba se comprometieron a destinar recursos del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) para mejorar la infraestructura, servicios básicos y otras necesidades de las unidades policiales. Este compromiso busca resolver problemas de atención que los uniformados enfrentaban en la zona.

La salida del contingente policial se produjo el 29 de octubre en medio de un conflicto que incluyó un bloqueo carretero de 24 días. Las movilizaciones, lideradas por simpatizantes de Morales, exigían que se permita al exmandatario postularse a las elecciones generales de 2025 y que se archiven procesos judiciales en su contra por delitos como trata y tráfico de personas. Este bloqueo dejó heridos tanto a policías como a periodistas, además de afectar gravemente la conectividad en la región.

El retorno, previsto para este mediodía, fue coordinado por el viceministro de Régimen Interior, Jhonny Aguilera; el viceministro de Seguridad Ciudadana, Roberto Ríos; y autoridades locales del trópico. Russo adelantó que el Comando Departamental de Cochabamba evaluará la posibilidad de aumentar tanto el personal como las unidades policiales en función de las necesidades de la población.

El repliegue inicial fue una medida de seguridad debido al hostigamiento de grupos de choque que bloquearon rutas estratégicas en Cochabamba, dejando aislado al trópico del resto del país. Ahora, con los nuevos compromisos asumidos, las autoridades buscan garantizar la presencia policial y la estabilidad en esta conflictiva región.

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