El Gobierno de Bolivia, a través del Ministerio de Salud, ultiman los detalles para la llegada de 560.000 dosis de vacunas contra el Covid-19, que se prevé arriben al país este fin de semana. Esta nueva partida forma parte de las gestiones realizadas a través del mecanismo internacional Covax, con el objetivo de reforzar la protección de la población boliviana ante la pandemia. Las dosis serán distribuidas a los servicios departamentales de salud (Sedes) para su distribución en los diferentes puntos de vacunación del país.

La ministra de Salud, María Renée Castro, destacó que la distribución de las vacunas será organizada según el tamaño poblacional de cada región, priorizando a los grupos más vulnerables, tales como adultos mayores de 60 años, personas con enfermedades preexistentes, mujeres embarazadas y personal de salud. Además, el Ministerio de Salud trabajará en coordinación con los Sedes para realizar una evaluación continua y garantizar que las dosis lleguen a los lugares más necesitados.

Actualmente, Bolivia cuenta con más de 160.000 dosis de vacunas que están siendo distribuidas por los Sedes a través de puntos de vacunación móviles y fijos en todo el país. Estas vacunas tienen carácter anual, por lo que se espera que su administración continúe a lo largo de este año para mantener la protección contra el Covid-19 en la población.

Por otro lado, el departamento de Cochabamba reportó el primer fallecimiento por Covid-19 en la región desde el inicio de 2025. Rubén Castillo, jefe de la Unidad de Epidemiología del Sedes Cochabamba, confirmó que un hombre de la tercera edad, quien residió en Santa Cruz durante 45 años, murió a causa del virus tras presentar síntomas agudos y complicaciones derivadas de enfermedades preexistentes como la diabetes. Las autoridades locales están investigando el caso en el municipio de Totora, donde ocurrió el deceso.

Este incidente subraya la importancia de mantener las medidas de prevención y la vacunación constante, a pesar de los avances logrados en la lucha contra la pandemia. El gobierno boliviano sigue trabajando en estrategias para mitigar los riesgos de nuevas olas de contagios y garantizar el bienestar de la población.

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